11.10.15

La finalidad de la Creación.

La finalidad de La Creación es contagiar a todas las formas de vibración inferior, de la vibración más elevada, mediante la acción ENTRÓPICA.

La finalidad de La Creación es transmutar en su totalidad toda energía existente, en energía cuyo rango de frecuencia sea el más elevado posible. 

Ese segmento de energía cuya vibración es el más elevado posible es a lo que llamamos Conciencia Superior. 
La finalidad de La Creación es pues convertir toda energía existente en Conciencia Pura

Para tal fin La Creación, en su inicio, se auto convierte en Universos distintos y heterogéneos donde dispersar, separar y redistribuir los distintos tipos de energías existentes según su rango de frecuencia vibratoria. Se auto convierte en multitud de universo; en el Multiverso. 

Las tradiciones antiguas hablan del comienzo de la Creación como un momento en el que existía el Caos. Todo estaba mezclado, oscuro y confuso. Entonces "Dios decide" dar comienzo a La Creación. 

La ciencia nos explica que el Universo comenzó con el Big Bang, un estallido inicial seguido de un proceso inflacionario por el que la materia se distribuyó por todo el Universo. 
La materia se distribuye por el Universo como consecuencia de ese estallido creativo inicial, consecuentemente se distribuyen y organizan todas las energías que son inherentes a la materia. Por tanto, quedan estratificados todos los rangos vibratorios de energías que conforma la materia, dando lugar a todas las dimensiones existentes.

Tal como indico en el encabezamiento del blog, "las mitologías antiguas trataron de explicarnos con metáforas lo que la ciencia comienza ahora a desvelarnos"

Y esto es lo que la mitología hindú ya nos hablaba hace miles de años...
Según ésta: La Creación del Universo tuvo lugar a partir del remanente de un gigantesco dios primordial llamado Púrusha (varón). 

Según el budismo: el Universo emanó a partir de un huevo cósmico. Del huevo nació Prayapati que más tarde se identificó con Brahma. 

En los Puranás se presentan varios procesos de creación. 
En un rincón del infinito universo espiritual existe un "océano de causa material". Allí está acostada la más grande de las formas de Vishnú. De su cuerpo emanan los universos. En su ombligo se forma un lago, y sobre ese lago nace una flor de loto. Cuando la flor se abre, de ella nace el dios Brahma (un universo). 
Brahma crea todo el universo con todos sus astros visibles e invisibles, los dioses y otros seres. 

Pero además, estas mitologías antiguas nos ofrecen una cronología tan extensa que supera la propia edad del Universo. 

El hinduismo divide el tiempo en grandes eras o yugas. Hay cuatro yugas de distinta duración. Un ciclo completo de estos cuatro yugas suponen 4.320.000 años. 
Un Kalpa son 1.000 yugas, que supone 4.320 millones de años. Y así discurre el tiempo en el Universo eternamente. 
Para el tiempo de existencia de este Universo (o Brahma) se contabiliza que un día de Brahma son dos kalpas, uno corresponde al día y otro a la noche, que suman en total 8.640 millones de años. Y Brahma vive 100 años cada uno de 365 días, que corresponde al ciclo de vida del Universo, donde este vuelve a desaparecer, para más adelante volver a renacer. 
Nuestro Universo Brahma tiene ya una antiguedad de 50 años, es decir, ha nacido por 50 veces. 

Simbólicamente o no, los periodos de tiempo expresados por estos mitos sagrados nos explican una extensión de él muy superior a la que la ciencia teoriza sobre la edad de nuestro Universo. 
¿No será entonces que no solo nos hablan de la edad de nuestro universo, nacido y renacido por 50 veces, sino que también hacen un cómputo de la existencia del Todo, de toda La Creación misma? 

Según las últimas teorías científicas sobre la existencia de múltiples universos, relativas a los distintos argumentos como la teoría M, surgida a partir de la teoría de cuerdas, el Multiverso, o la totalidad de los universos, surgieron de una "singularidad", una especie de punto cero de densidad infinita que se expandió por medio de un fenómeno de inflación; una vez expandido crea una trama de "objetos" llamados p-branas (de membranas) donde "P" denota su dimensionalidad. También se sugiere que el big bang de nuestro universo fue producido por la colisión de dos de estas membranas, brotando nuestro Universo. 

Queda clara pues la similitud entre la teoría M de la mecánica cuántica sobre la aparición del Universo, y la mitología hindú-budista. A ambas añado mis ideas deducidas aportando un más completo argumento...

En el principio existía La Conciencia Primigenia como entidad absoluta y única, el Vishnú hindú, en un estado de incertidumbre. Esta singularidad inicial como punto cero de densidad infinita, decide estallar y dividirse en una infinidad de corpúsculos de conciencia, a la vez que crea la energía en sus distintas frecuencias, dándose el fenómeno de la Inflación. De esta manera puede comenzar a desligarse de ese estado de incertidumbre.
Vishnú, o la Conciencia Primigenia, crea así una trama de energías asentadas en distintas dimensiones o branas (membranas) superpuestas. Cada membrana o brana posee un determinado número de dimensiones. 
Entonces Vishnú, o la Conciencia Superior (no denominada Conciencia Primigenia pues ya se ha dividido en una infinidad de conciencias) comienza a crear diferentes universos por medio de sus branas. Cada vez que dos branas chocan, se produce el fenómeno denominado Big Bang apareciendo un universo (Brahma) del ombligo de Vishnú. Las branas chocan una y otra vez, creando universos constantemente, como flores de loto, constituyéndose así el Multiverso: muchos universos existentes a la vez. 
Este proceso continúa aún ahora mismo; los universos se siguen creando; a la vez, los primeros universos creados tras un periodo de tiempo (kalpas) de existencia, han vuelto a ser reabsorbidos mediante un "big cruch", para volver a nacer nuevamente mediante un futuro "big Bang". 
Así, nuestro Universo ha sufrido este proceso de Big Bang y Big Crunch durante 49 veces, ahora estamos en el ciclo número 50. 

Este es el método de perfección de los universos, en Toda La Creación. Esta es la forma en que los universos evolucionan. 
Toda conciencia y toda energía (ser) que lo conforman deben perfeccionarse, deben evolucionar hasta sublimarse para llegar a la Meta Final: formar parte de la Conciencia Superior. 

Para que toda conciencia pueda sublimar toda la energía contenida en un universo, no es suficiente un solo ciclo de existencia de cualquier universo. Por ello se establecen los ciclos de naceres y renaceres. "Semejante a los latidos del corazón de Brahma", o "como su periodo de sueño y de vigilia día tras día".
Todos estos ciclos concluirán cuando toda conciencia existente evolucione, y haga evolucionar a toda la energía existente hasta llegar a la Meta Final, la unión definitiva (moksha) con la Conciencia Superior o Perfecta.

En este preciso instante, ahora mismo, existen multitud de universos más antiguos al nuestro. Sus niveles evolutivos son superiores; la distribución de sus dimensiones pues, son distintas. En algunos de ellos, los primeros en surgir, ya no existe la materia formada por partículas subatómicas con baja frecuencia de vibración, sino solo materia-energía constituidas por cuerdas de alta frecuencia. Se trata de universos evolucionados donde solo existen las dimensiones más elevadas. Se trata de universos donde las leyes naturales son distintas. 
Este es pues  el camino  de todo universo, incluido el nuestro. 
De la misma forma existen otra multitud de universos más jóvenes que el nuestro, por tanto el nivel de sus dimensiones son menos evolucionados. Estos contienen más materia-energía de baja frecuencia que la existente en nuestro Universo. Deben pasar pues por más ciclos de existencias; de nareceres y renaceres: más ciclos de big bang-big cruch. 

Pero todos los universos que conforman el Multiverso tienen un punto en común: la Meta Final o la unión con la Conciencia Perfecta, hasta llegar a transformarse todo lo existente en todos los universos, toda la energía contenida y las conciencias, en Una Única Conciencia Cósmica Perfecta y Eterna. 

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